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munal.gob.mx
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mayo
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2013
EL ACERVO DEL MUNAL
LA GENEROSA
CONFIANZA
PRESENTAMOS TRES CASOS RECIENTES QUE ACUSAN LA CONFIANZA DE LOS COLECCIONISTAS Y HEREDEROS DE LOS
ARTISTAS POR SUMAR BIENES ARTÍSTICOS, A TRAVÉS DE LA DONACIÓN, AL ACERVO DEL MUSEO NACIONAL DE ARTE:
BRIGITTE ANGUIANO, OLIVERIO MARTÍNEZ Y COLECCIÓN ARTURO GARCÍA BUSTOS.
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VÍCTOR T. RODRÍGUEZ RANGEL
La confianza que el Museo Na-
cional de Arte ha generado en los
coleccionistas, las instituciones, las
galerías, los artistas y en los herede-
ros de los mismos, debido al compro-
miso profesional por custodiar, con-
servar, exhibir, interpretar, estudiar
y divulgar el patrimonio artístico de
todos los mexicanos, ha detonado el
espíritu filantrópico de la donación,
camino por el cual el Munal ha re-
cibido excepcionales obras que han
aumentado la colección y elevado la
eficacia educativa de nuestra exposi-
ción permanente, con producciones
de los más célebres maestros del arte
nacional de los periodos atendidos
por nuestra vocación.
Las condiciones museísticas de
la sede son ampliamente recono-
cidas, en nuestra firme misión por
hacer del Munal la más importante
sala de exhibición que enaltezca y
proteja las creaciones estéticas re-
presentativas de la historia del arte
mexicano. Estos son sólidos argu-
mentos para que los propietarios
depositen sus
obras maestras
en
nuestra institución, a sabiendas que
se desprenden de ellas pero con la
confianza de que tendrán un marco
adecuado para ser presentadas al
público diverso. El Comité para la
Recepción de Donaciones de Obras
con Valor Artístico del inba -que
sesiona periódicamente-, avala la
adecuada incorporación de estos
bienes, por sus características, a los
discursos curatoriales que despliega
el Museo en su exhibición.
Desde que se fundó el Munal
en 1982, y hasta la actualidad, las
donaciones recibidas son una con-
tribución fundamental para el cons-
tante incremento de la colección.
Gracias al compromiso de nuestro
Museo con la sociedad, en sentido
recíproco los coleccionistas, las aso-
ciaciones civiles, las instituciones
gubernamentales con perfil cultural,
las galerías y los particulares, han
aportado el 18.67 por ciento de la
totalidad del acervo*.
Estas rutas de ingreso de obra
no se detienen. Recientemente se
han sumado las donaciones de Bri-
gitte Anguiano, Oliverio Martínez y
la Colección Arturo García Bustos,
mismas que contribuyen a diversi-
ficar nuestros artistas, periodos, téc-
nicas, tendencias y resoluciones.
BRIGITTE ANGUIANO
Brigitte Anguiano nos ha entregado
un espléndido dibujo de Raúl An-
guiano, ligado como estudio prepa-
ratorio a una pintura en el Munal do-
nada por María Asúnsolo, que es la
obra definitiva de este bosquejo.
Sobre el dibujante, José Raúl
Anguiano Valadez nació en Guada-
lajara en 1905 y formó parte de la
legión de artistas jaliscienses pro-
minentes, como Orozco, Montene-
gro, González Camarena, el Dr. Atl,
María Izquierdo, Orozco Romero
y Guerrero Galván, quienes contri-
buyeron con sus creaciones al es-
plendor del arte mexicano del siglo
xx, que cosechó prestigio interna-
cional, teniendo el acervo del Mu-
nal algunas de las mejores obras de
todos ellos. Anguiano fue un gran
muralista del relevo generacional
luego de los precursores de la llama-
da Escuela Mexicana de Pintura y
Escultura. Fue también un brillante
pintor de caballete, explorando los
temas nacionalistas, costumbristas
e indigenistas.
Ilustrador gráfico, Anguiano
fue uno de los fundadores del Taller
de la Gráfica Popular en 1938, de la
mano de los artistas de denuncia so-
cial como Leopoldo Méndez y Pablo
O´Higgins, orientando su trabajo a
las causas campesinas y obreras. Al
mismo tiempo, Anguiano fue funda-
dor del Salón de la Plástica Mexicana,
de la cual fue también profesor. Inte-
grante de la Liga de Artistas y Escri-
tores Revolucionario (lear), la refi-
nada producción pictórica del tapatío
es valorada en múltiples colecciones
nacionales e internacionales.
Es probable que este minucioso
dibujo, que evidencia la calidad aca-
démica de un fisonomista puntual,
haya tomado como fuente de inspira-
ción una antigua fotografía de estudio,
en la que el modelo es el padre de la
promotora de arte María Asúnsolo
cuando era niño. El señor Manuel
Dolores Asúnsolo alcanzó el grado, en
su juventud, de general zapatista, pero
en estos finos trazos aparece inocente
y alegremente ataviado como marine-
rito, con un fondo propio de los recur-
sos visuales y la utilería de las casas de
estudios fotográficos: seguro el disfraz
era del mismo establecimiento. Llama
poderosamente la atención la proyec-
tada expresión adusta y soberbia que
el artista planteó del infante, propio
del carácter recio del señor Manuel
Asúnsolo, al cual conoció.
El perfil acabado y magistral del
dibujo es por sí mismo una obra maes-
tra; sin embargo, se considera un bo-
ceto porque el mismo Munal cuenta
con la obra pictórica definitiva, siendo
a todas luces evidente que tienen casi
todo en común, fuera de unos peque-
ños detalles que agregó Anguiano a la
composición en el óleo sobre tela. Al
reunirse nuevamente las dos piezas y
ahora en el Munal, pueden en cierto
momento exponerse juntas para ma-
nifestar el proceso creativo.
COLECCIÓN ARTURO
GARCIA BUSTOS
Arturo García Bustos combinó sus
cualidades natas como dibujante con
su decisión de estudiar de manera
formal arte y acercarse al círculo de
los pintores mexicanos vanguardistas
de las décadas pos-revolucionarias,
momento en el que en la nación se
Raúl Anguiano,
Retrato de Manuel Dolores.