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mayo
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2013
PUERTAS ADENTRO
Anverso
reverso
¿QUÉ HAY DETRÁS DE UNA OBRA DE ARTE? ¿CUÁL ES EL
CAMINO QUE RECORRE UNA PIEZA PARA LLEGAR A UNA
EXHIBICIÓN? ¿CUÁLES SON LAS ÁREAS QUE CONFORMAN
EL PROYECTO DE EXPOSICIONES TEMPORALES DEL MUSEO
NACIONAL DE ARTE? Y ¿EN QUÉ CONSISTE SU TRABAJO?
A TRAVÉS DE ESTE TEXTO, EL MUNAL APROXIMA A
SUS LECTORES AL PROCESO QUE ESTÁ DETRÁS DE LA
EXPOSICIÓN
VANGUARDIA EN MÉXICO, 1915-1940
QUE
ABRE SUS PUERTAS AL PÚBLICO ESTE MES EN LA SALA DE
COLECCIONES ESPECIALES.
»
MANUEL TREJO
E
n términos pictóricos, la dis-
tinción entre anverso y reverso
se refiere a las dos caras de una
obra de arte; es decir, en algunos
casos los autores utilizan ambos lados
del lienzo para presentar su discurso
visual. Por lo general, el anverso es el
lado más reconocido socialmente; sin
embargo, el reverso es una posibilidad
a la que pocos pueden acceder. Si-
guiendo con esta metáfora, el proceso
que antecede a la inauguración de esta
exposición es un camino por el que
pocos pueden transitar.
Los equipos de trabajo que par-
ticipan de manera conjunta en el pro-
yecto de exposiciones temporales del
Munal son: Museografía, Difusión,
Curaduría, Comunicación Educativa,
Editorial, Sistemas, Medios Electró-
nicos, Desarrollo Institucional y la
Subdirección de Exhibición, que se
encarga de coordinar el trabajo entre
las áreas antes mencionadas. Además
del trabajo conjunto entre las distintas
áreas integradas en el proyecto de ex-
posiciones temporales, cabe mencio-
nar que las fases fundamentales que
posibilitan la consolidación de una
exposición son:
La elaboración de un guión cura-
torial en el que se desarrollan una serie
de premisas a través de las cuales se
construye el concepto que dará senti-
do a toda la exposición, y a su vez se
presenta una lista de obra preliminar
que incluye una propuesta de articu-
lación de diversos núcleos temáticos,
que dan cuenta de un tema más am-
plio. En el caso específico de
Vanguar-
dia enMéxico, 1915-1940
, la propuesta
curatorial estuvo a cargo de Renato
González Mello (Instituto de Investi-
gaciones Estéticas, unam) y Anthony
Stanton (El Colegio deMéxico). En esta
primera fase, la Subdirección de Exhi-
bición comunica al resto de las áreas la
propuesta curatorial para llegar a un
consenso que permita expresar las ne-
cesidades de cada uno de los equipos
involucrados y resolver la viabilidad
del proyecto.
Un segundo momento en este
proceso es la gestión de obra: el Mu-
nal, a través de su Subdirección de Ex-
hibición y el área de Registro de Obra,
se encargan de solicitar en calidad de
préstamo las piezas que conformarán la
oferta visual de la muestra, que en este
caso es de cerca de 120 obras pertene-
cientes a más de 40 colecciones, entre
las que se encuentran el acervo del
Instituto de Investigaciones Estéticas
(unam), el Instituto de Investigaciones
Filológicas (unam) y la Hemeroteca
Nacional (unam), el Museo Regional
de Guadalajara (inah), la Fototeca de
Nuevo León y la Asociación Manuel
Álvarez Bravo A. C., entre otras.
De manera paralela a la gestión de
obra, el área de Museografía se encar-
ga de la habilitación de salas llevando
a cabo la consolidación del proyecto
museográfico, el cual implica la trans-
formación del espacio a partir de las
necesidades curatoriales y las adapta-
ciones técnicas requeridas para la con-
servación de cada una de las obras.
Un tercer momento, tiene que
ver directamente con el área de Re-
gistro de Obra, misma que se encarga
del aseguramiento de colecciones, el
embalaje y el traslado de las obras
al Museo, mismas que son recibidas
en la bodega de tránsito para llevar a
cabo su dictaminación, y de esta ma-
nera establecer los requerimientos de
cada una de las piezas que ingresan a
este recinto. Posteriormente, uno de
los últimos pasos en este camino es el
montaje de las piezas.
Los invitamos para que nos acom-
pañen en la culminación de este pro-
ceso llamado
Vanguardia en México,
1915-1940
, viendo con sus propios
ojos la exposición.
El proceso del montaje comienza con el acondicionamiento de la sala en la que será exhibida la obra. Hay que resanar, pintar y darle una
cara nueva a las paredes.
Los carpinteros se encargan de levantar las mamparas ideadas por el museógrafo.
Algunos materiales se utilizan de exposiciones anteriores, otros son nuevos.
Cada exposición tiene su propia museografía, y poco a poco va tomando forma, gracias
a la entrega de los trabajadores.