Fundado en 1982, el Museo Nacional de Arte abrió sus puertas con un acervo de 1124 obras procedentes de la red museística del Instituto Nacional de Bellas Artes y de sus distintas dependencias. Desde entonces, la vocación del Museo ha sido conservar, custodiar, exhibir, interpretar, estudiar y difundir la creación artística producida en México –por locales y extranjeros– entre 1550 y 1954; reuniendo en una misma colección a destacados artistas de distintas vertientes, escuelas, géneros y modalidades que configuran un panorama integral de la cultura visual en los contextos novohispano y de los siglos XIX y primera mitad del XX.
Las salas permanentes del Museo Nacional de Arte ofrecen al público un recorrido por cinco siglos de historia del arte mexicano, con obras de maestros de la talla de Andrés de Concha, José Juárez, Sebastián López de Arteaga, Cristóbal de Villalpando, Miguel Cabrera, Manuel Tolsá, Santiago Rebull, Felipe S. Gutiérrez, Juan Cordero, José María Velasco, Saturnino Herrán, Ángel Zárraga, Alfredo Ramos Martínez, Gerardo Murillo (Dr. Atl), María Izquierdo, Diego Rivera, Frida Kahlo, José Clemente Orozco y David Alfaro Siqueiros, entre mucho otros.
Las acciones de adjudicación, adquisición y donación que el Museo Nacional de Arte y el Instituto Nacional de Bellas Artes han promovido desde 1982, se traducen en un notable incremento del acervo, constituido por pinturas, esculturas, dibujos, fotografías, grabados, impresos, artes populares y decorativas. A la fecha, el museo resguarda en su recinto cerca de 4,000 piezas, que lo posicionan como la colección pública de arte mexicano más importante del país.